martes, octubre 26, 2004

Diario de una mujer...a dieta !!!!!

Querido Diario:



Hoy comencé a hacer dieta. Preciso perder 8 Kg. El médico me aconsejó escribir un diario donde debo colocar mi alimentación y hablar de mi estado de ánimo.
Me siento de vuelta en la adolescencia pero estoy muy entusiasmada con todo. Por más que la dieta sea dolorosa, cuando consiga entrar en ese vestidito negro maravilloso, va a estar todo perfecto...


Primer día de dieta. Un pedazo de queso blanco. Un tazón de cereales diet. Mi humor está maravilloso. Me siento más liviana. Un leve dolor de cabeza tal vez..

Segundo día de dieta. Una ensaladita rápida. Algunas tostadas y un vaso de yoghurt. Aún me siento maravillosa. La cabeza me duele un poquito más fuerte pero no es nada que una aspirina no pueda solucionar.

Tercer día de dieta. Me desperté en el medio de la madrugada con un ruido extraño... Creí que era un ladrón, pero después de un tiempo me di cuenta que era mi propio estómago haciendo un ruido que daba miedo... Tomé un litro de té... Estuve en el baño el resto de la noche. Anotación: Nunca más tomo té de manzanilla.

Cuarto día de dieta. Estoy comenzando a odiar la ensalada. Me siento una vaca mascando pasto. Estoy medio irritada. Pero creo que es el tiempo. Mi cabeza parece un tambor... Mi compañera de trabajo comió una torta alemana hoy en el almuerzo. Pero yo resistí!. Anotación: Odio a mi compañera de trabajo. Siempre fue una yegua.

Quinto día de dieta. Juro por Dios que si yo veo un pedazo más de queso blanco en mi frente, vomito! Mi almuerzo, una ensalada, parecía reírse en mi cara... Preciso calmarme y volverme a concentrar. Compré una revista para leer mientras almorzaba, con Dolores Barreiro en la tapa. Mi meta. No puedo perder el foco. Anotación: Me detuve mirando la contratapa, tardé más tiempo del que me llevó comer la ensalada. Era la promo de "Solo Empanadas"...

Sexto día de dieta. Estoy muerta. No dormí nada a la noche. Y lo poco que conseguí soñé con un flan de vainilla. Creo que hoy mataría por un pedazo de alfajor...en vez de ver personas; por momentos veo porciones.

Séptimo día de dieta. Fui al médico. Adelgacé 250 gramos. Es una joda, la gran puta!. Toda la semana comiendo pasto. Solamente me faltó mugir y perdí 250 gramos!.El explicó que es normal. La mujer demora más en adelgazar, más a mi edad... El HDP me llamó de gorda a vieja! Anotación: Buscar otro médico. Encima que es caro, no puedo dejar que me humille!!!.

Octavo día de dieta. Fui despertada hoy por un pollo asado. Lo juro!! El estaba en la punta de la cama, bailando cumbia villera. Anotación: Mis compañeros de trabajo me empezaron a mirar raro...

Noveno día de dieta. Hoy no fui a trabajar. El pollo asado me volvió a despertar, parecía una odalisca; danzando la danza del vientre esta vez. Pasé el día en el sofá viendo tv. Creo que existe un complot. Todos los canales pasaban recetas de cocina. Enseñaban a hacer tarta de frutillas, lasaña y selva negra..., todos comen!, pero la gorda soy yo. Anotación: Comprar otro control remoto..., en un arranque de furia, lo tiré por la ventana. Me siento como un poco nerviosa...

Décimo día de dieta. Odio a Dolores Barreiro. Anotación: Cuando me miro en el espejo; me noto una mirada "rara"...

Décimo primer día de dieta. Pateé al perro de mi vecina, se acercó moviendo la cola. Grité como una loca. El cadete no entra más a mi oficina y las secretarias se tiran contra la pared cuando yo paso. Anotación: Comprar cajas de carilina, noté que al estar en la pc. y pensar en porciones de pizza, babeo el teclado.

Décimo segundo día de dieta. Sopa. Eructo ajo. Anotación: Nunca más juego póquer con el pollo asado. El roba.

Décimo tercero día de dieta. La balanza no se mueve. Ella no se mueve! No perdí un mísero puto gramo! Comencé a reírme a carcajadas. Asustado, el médico, sugirió un psicólogo. Creo que llegó a decir psiquiatra o tratamiento. Será porque yo lo amenacé con un bisturí , cuando lo agarré de las solapas? Anotación: No vuelvo más al médico, el pollo cree que es un chanta, que lo único que hace es sacarme la plata!.

Décimo cuarto día de dieta. El pollo me presentó unos amigos. El lomo es un intelectual, el buen vino; es redivertido y la torta; es un poco callada, con pinta de amarga. Jugamos al truco hasta la madrugada.

Décimo quinto día de dieta. Maté a Dolores B!. La corté en pedacitos al igual que a todas las fotos de las modelos súper flacas que tenía en mi casa .. Anotación: El pollo y sus amigos están fastidiados conmigo. Comí un pedazo del Sr. Pan. Pero fue en legítima defensa. El me amenazó con un pedazo de salame, en plena timba!.

Décimo sexto día. No estoy más a dieta. Enojadísima, nos puteamos con el pollo, me lo comí junto con el pan. Y arremetí con la torta. Ella realmente era una dulce !!!. Anotación: Encontré una notita debajo de la puerta de entrada, es de mis compañeros de la oficina, dicen que me visitarán en la Clínica.


Gracias Luna Celestial !!!

domingo, octubre 17, 2004

LAS MUJERES SIEMPRE GANAN





El TRIPLE FILTRO DE SÓCRATES


En la antigua Grecia, Sócrates fue famoso por su sabiduría y por el gran respeto que profesaba a todos. Un día un conocido se encontró con el gran filósofo y le dijo:

- ¿Sabes lo que escuché acerca de un amigo tuyo ?

- Espera un minuto - replicó Sócrates.
Antes de decirme nada quisiera que pasaras un pequeño examen. Yo lo llamo el examen del triple filtro.

- ¿Triple filtro?

-Correcto -continuó Sócrates.
Antes de que me hables sobre mi amigo, puede ser una buena idea filtrar tres veces lo que vas a decir. Es por eso que lo llamo el examen del triple filtro. El primer filtro es la verdad.
¿Estás absolutamente seguro de que lo que vas a decirme es cierto?

- No -dijo el hombre-, realmente solo escuché sobre eso y...

- Bien -dijo Sócrates. Entonces realmente no sabes si es cierto o no.
- Ahora permíteme aplicar el segundo filtro, el filtro de la bondad.
¿Es algo bueno lo que vas a decirme de mi amigo?

- No, por el contrario...

- Entonces, deseas decirme algo malo sobre él, pero no estás seguro de que sea cierto.

- Pero podría querer escucharlo porque queda un filtro el filtro de la utilidad.
¿Me servirá de algo saber lo que vas a decirme de mi amigo?

- No, la verdad que no.

- Bien -concluyó Sócrates-, si lo que deseas decirme no es cierto, ni bueno, e incluso no es útil ¿para qué querría saberlo?

Gracias Daniel !!